Media vida, Premio Nadal 2017, nos ha dado la oportunidad de adentrarnos en la
vida de cinco amigas a lo largo de treinta años, desde 1950 (primera parte), hasta
1981 (Segunda parte), en todos los cambios personales y sociopolíticos que se
llevaron a cabo en España y cómo cada una se enfrenta a ellos. El verdadero cambio,
el purificador y expiatorio, llega para estas amigas con el efecto media vida que da
título al libro y con la reunión en el restaurante (También denominado así), en el que
se reencuentran treinta años después y donde transcurre parte de la historia.
Destacamos el tratamiento delicado y eficaz de temas como la culpa; el
arrepentimiento; el perdón (El perdón no es un intercambio, sino un don gratuito y
carente de lógica, que nadie puede comprar. Pág. 262); la memoria perdurable de
la niñez (Las cinco coinciden en un internado, con catorce años y viven una
experiencia que les marcará); la desigualdad de hombres y mujeres; las rígidas
conductas sociales o la educación sentimental y sexual.
Una novela en la que hay que valorar la perfección de su estructura, todo encaja
como si fuera una “pieza de relojería narrativa”, con unos diálogos vibrantes, hasta
conseguir escenas verdaderamente teatrales, como las del restaurante donde se reúnen
las amigas después de 30 años .
El lunes, 24 de enero, tuvo lugar, en la biblioteca del instituto, la sexta sesión de
nuestro Taller de Lectura, como siempre abierto a nuevas incorporaciones, dedicada
esta vez a la novela Media vida (2017), de la escritora y crítica literaria Care Santos.
El encuentro que tuvo la escritora en el mes de noviembre, con los alumnos de
Tercero y Cuarto de ESO del IES Arca Real y al que asistimos una parte del Grupo
de Lectura, nos animó a dedicarle esta sesión.
Es el “efecto media vida”―le dijo Julia―. A mí también me está
pasando. Sientes que ha llegado el momento de hacer las cosas de
otra manera, de reconciliarte contigo misma, tal vez de saldar
deudas personales (Pág. 289).