Taller de lectura: reseña de “LA TREGUA”

El lunes, 20 de noviembre de 2023, dedicamos nuestra segunda sesión de lectura a la novela La tregua (1960), del escritor uruguayo Mario Benedetti (1920-2009). Su extensa producción literaria, que incluye cuentos, novelas, poesía, ensayos, canciones, teatro y crítica cinematográfica, reflejan un mensaje cargado de un gran compromiso ético, social y político.

Es uno de los poetas favoritos de muchas generaciones de lectores, y así lo demuestran sus libros Poemas de la oficina (1956), Poemas de otros (1974), La casa y el ladrillo (1977), El mundo que respiro (2001), El amor, las mujeres y la vida (1995) y Canciones del que no canta (2006).

Entre sus obras narrativas destaca La tregua, novela que le consagró como escritor y con la que inició su proyección internacional. La acción se sitúa en Montevideo (Uruguay), entre el lunes 11 de febrero de 1957 y el viernes 28 de febrero de 1958. Martín Santomé, el protagonista, tiene entonces 49 años. Su historia, recogida en un diario, está impregnada de la tristeza, monotonía y frustración de un hombre viudo, Mario Santomé, con tres hijos y un buen puesto de trabajo, que desea cada día su próxima jubilación. Desde que murió su mujer, su acontecer diario es gris, rutinario y pesimista. Sin embargo, su vida cambia por completo cuando se enamora de una compañera de trabajo, Laura Avellaneda, de 24 años. Esta joven es su tregua, la razón que le devuelve las ganas de vivir y la emoción, aunque su oscuro destino le sigue acechando.

La tregua nos ha atraído por la sencillez formal y, al mismo tiempo, por su calidad literaria, cercana en muchos momentos al lenguaje poético; por la emoción que transmiten sus palabras; por la perfecta caracterización de sus personajes o la maestría del autor para saber conjugar el presente con la frecuente rememoración de pasado.

Mario Benedetti logra que formemos parte de las reflexiones profundas que plantean Martín Santomé, y otros personajes de la novela, sobre el paso inexorable del tiempo; la incomunicación; lo espontáneo e intuitivo frente al raciocinio y la duda; El ansia por querer creer en Dios; la resignación, o el concepto de felicidad. Reflexiones que, sin duda, suscitaron un interesante intercambio de opiniones en nuestro taller de lectura.

Es evidente que Dios me concedió una tregua. Al principio, me resistí a creer que eso pudiera ser la felicidad, Me resistí con todas mis fuerzas, después me di por vencido y lo creí. Pero no era la felicidad, era sólo una tregua.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Scroll al inicio
Esta web utiliza cookies propias y de terceros para su correcto funcionamiento y para fines analíticos. Contiene enlaces a sitios web de terceros con políticas de privacidad ajenas que podrás aceptar o no cuando accedas a ellos. Al hacer clic en el botón Aceptar, acepta el uso de estas tecnologías y el procesamiento de tus datos para estos propósitos. Configurar y más información
Privacidad